El nudo Ashley es parecido al nudo zepelín y consiste en dos nudos simples entrelazados que se usan para unir dos cuerdas. Puede resultar difícil de desatar. Este nudo fue creado por Clifford Ashley para su uso con material rígido y resbaladizo. En las pruebas realizadas por Ashley, el nudo no presentó ningún deslizamiento, igualando su resistencia a la del nudo de sangre. Todos los demás nudos que se probaron sufrieron algún tipo de deslizamiento.
Advertencia
Verifica la técnica del nudo con un instructor habilidoso cuando un error en el nudo pudiera causar daños materiales, lesiones o muerte.